Hoy os traigo otra receta de la revista Lecturas Cocina, cuando la vi no dude en prepararla, por qué la combinación rúcula y pasta me gusta, pero me llamo la atención la combinación con requesón, (pero yo he utilizado mató que tenía un tarrina apunto de caducar) y me pareció una forma más ligera de comer pasta.
El mató es un queso fresco, típico de la gastronomía catalana, tiene menos grasa que otros quesos, su elaboración se remonta ya en la época medieval y se elaboraba con leche de cabra u oveja. Este queso se suele utilizar para postres y se acompaña con miel.

Tagliata con salsa de rúcula y mató

Ingredientes
para 4 personas
400 gr de pasta (yo Tagliata)
150 gr de mató o requesón
100 gr de rúcula
10 hojas de albahaca
2 dientes de ajo
50 gr de piñones tostados
6 cucharadas de aceite de oliva virgen
sal
pimienta


Preparación

Lavamos la rúcula (reservamos unas hojas para decorar los platos)  y la albahaca, secamos y picamos.
Pelamos los ajos, picamos finamente y los doramos en una sartén con tres cucharadas de aceite de oliva virgen,
Cuando empiecen a tomar color añadimos la albahaca y la rúcula y salteamos unos 2 minutos.
Ponemos el contenido de la sartén en el vaso de la batidora y añadimos el resto del aceite de oliva virgen, salpimentamos y trituramos hasta obtener una salsa homogénea.
En una olla ponemos agua a hervir ligeramente salada y cocemos la pasta siguiendo las indicaciones del paquete. Escurrimos y los colocamos en una fuente, vertemos la salsa junto con los piñones y mezclamos que quede bien impregnada.
Repartimos la pasta en los platos, distribuimos el queso escurrido y desmenuzado, decoramos con unas hojas de rúcula y servimos caliente.

Tagliata con salsa de rúcula y mató