El otoño tímidamente se va haciendo notar, las mañanas son cálidas y las noches más frías, los árboles empiezan a mudar el color verde por esos maravillosos colores naranjas.
El otoño es sin duda una de mis estaciones preferidas, junto con el invierno claro… :)) el  frío me llena de energía, no me da pereza hacer nada, todo lo contrario del verano que me deja fuera de combate con sus altas temperaturas. No importa que oscurezca antes, me gusta la calidez de la luz ambiental, o de las velas, tomar un café o un té con un buen libro debajo de una manta, irme a dormir arropada por la ligereza del edredón…salir a la calle con un buen abrigo y una bufanda…calzarme mis adorables botas… llegar a casa y encontrarla cálida… Definitivamente me encanta esta época del año.
Hoy os traigo uno de los ingredientes protagonistas del otoño, los boniatos.

Ingredientes

2 boniatos grandes
50 gr de queso rallado (cheddar y mozzarella)

2 tomates grandes
1/2 cebolla roja
1 puñado de cilantro
2 cucharadas de zumo de lima

PreparaciónPrecalentamos el horno a 200º.

Lavamos y secamos bien los boniatos. Los pinchamos con un tenedor y los depositamos en una bandeja apta para horno, espolvoreamos con sal, los asamos durante 45 minutos a 200º o hasta que estén tiernos.Mientras preparamos la salsa de tomate.Lavamos, secamos y retiramos el pedúnculo del tomate, los cortamos a daditos pequeños y los ponemos en un bol.

Cortamos la cebolla también a daditos y la incorporamos al bol junto con el tomate. Rociamos con el zumo de lima.

Picamos las hojas de cilantro.

Abrimos los boniatos por la mitad, troceamos un poco la pulpa, repartimos el queso rallado por la superficie, el mismo calor residual nos fundirá ligeramente el queso, cubrimos con la mezcla de tomate y cebolla, espolvoreamos con el cilantro y servimos.