Antiguamente los romanos y los griegos, responsables de su extensión en Europa, apreciaban mucho esta raíz, que suele consumirse crudo. Su textura crujiente y su color rojo los hacen muy vistosos en las ensaladas. Para encontrarlos en su mejor momento, los consumiremos durante los meses de primavera y verano.
Ingredientes
para 4 personas
hojas variadas de lechuga
4 o 5 rábanos
1/2 cebolla morada cortada en plumas fina
8 patatas mini de guarnición
3 cebolletas chinas
el zumo de 1/2 lima
2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
sal
Preparación
Lavamos las hojas de lechuga, las cebolletas y los rábanos, secamos bien.
Cortamos en rodajas finas los rábanos y la media cebolla.
En rodajitas las cebolletas.
Hervimos las patatas, bien lavadas ya que las consumiremos con su piel, hasta que estén tiernas pero que no se deshagan. Cuando podamos manipularlas cortamos por la mitad.
En un recipiente, batir hasta emulsionar el zumo de lima y el aceite de oliva virgen extra.
Repartimos en el recipiente donde vayamos a servir la ensalada, las hojas de lechuga, las patatas, la cebolla y las cebolletas, regar con la vinagreta de lima.