¿Quién puede negarse a una croqueta casera? Las croquetas siempre son bien recibidas, las súper famosas las de cocido, pero ahora las tenemos de todos los sabores, de gorgonzola, sobrasada, chipirones en su tinta, espinacas, chorizo….de chocolate, arroz con leche, tantas croquetas como imaginación.


Estas de hoy son de Carmen Ruscalleda, en el blog también las de Alberto Chicote. 

 

Ingredientes
180 gr de jamón ibérico
1 hueso de jamón pequeño (opcional)
500 ml de leche
1 cebolla
30 gr de mantequilla
25 gr de aceite de oliva virgen extra
100 gr de harina
50 gr de maizena
3 yemas de huevo
nuez moscada
sal
pimienta
para rebozar
1 huevo
3 claras de huevo
pan rallado
aceite de oliva virgen extra

Preparación

Hervimos la leche (poner un poco más de 500 gr, ya que reducirá) junto con el hueso de jamón, a fuego suave durante 20 minutos, para que quede bien infusionada.
En un bol mezclamos la leche infusionada, que colaremos previamente, la maizena, las yemas de huevo, pimienta, nuez moscada y una pizca de sal, con cuidado ya que el jamón aportará sal.
Ponemos el jamón en el vaso y damos dos golpes de turbo. Reservamos.
Pelamos la cebolla y cortamos a cuartos, añadimos el aceite de oliva virgen y la mantequilla, sofreímos durante 6 minutos, temperatura varoma, velocidad 3 1/2.
Añadimos la harina y tostamos minutos, temperatura 100º, velocidad 3.
Agregamos la mezcla de leche que teníamos reservada en el bol, mezclamos 5 segundos, velocidad 3.
Incorporamos el jamón mezclamos con la espátula y programamos 6 minutos, temperatura varoma, velocidad 3.
Ponemos la pasta en una manga pastelera,  o en una bandeja que taparemos con un film transparente para evitar que se haga costra.
Una vez fría la guardaremos en el frigorífico, mejor de un día para otro.
Al día siguiente cortamos la punta de la manga del grosor que queremos nuestras croquetas, hacemos tiras largas sobre una superficie de trabajo y cortamos a porciones.
Preparamos dos platos, en uno ponemos el huevo y las claras batidas y en otro el pan rallado. pasamos las croquetas primero por las claras batidas y luego por el pan rallado.
Freímos en abundante aceite de oliva virgen extra. Dejamos reposar sobre un papel absorbente de cocina para retirar el exceso de grasa y servimos.
Nota: si no las vamos a utilizar todas, podemos congelarlas una vez rebozadas. Las ponemos en una bandeja y congelamos separadas, cuando estén ya congeladas, guardamos en una bolsa apta para alimentos.

Receta adaptada con thermomix de Mi gran diversión.