El croque-monsieur, apareció por primera vez en la carta de un café parisino en el año 1910. Es un sándwich elaborado con pan de molde, jamón york y queso emmental o gruyere asado al horno, y la mayoría de las veces con una capa de gratinado.
A partir de aquí se han elaborado muchas versiones, acompañándolo de salsa Mornay, bechamel o empapando el pan en huevo.



Esta versión es de libro Nigella Lawson, pero yo he hecho algún pequeño cambio.

Ingredientes
8 rebanadas de pan de molde con cereales o normal
mostaza de Dijon
4 lonchas de queso gruyer
4 lonchas de jamón york
4 huevos
1 cucharadita de sal Maldon
80 ml de leche entera
4 cucharadas de queso rallado, gruyer, emmental o cheddar
un chorro de salsa Worcesteshire

Preparación

Unta las rebanadas de pan con la mostaza.

Haz 4 sándwiches poniendo una loncha de queso sobre cada rebanada de pan, una de jamón y otra de pan.
Corta los sándwiches por la mitad en forma de triángulo.
Ponlos en una fuente apta para horno (27x 21).
Bate los huevos, la sal y la leche, verter sobre los sándwiches, cubre la bandeja con film transparente y deja toda la noche en el frigorífico.
Precalienta el horno a 200º.
Saca la bandeja del frigorífico, quita el film transparente, espolvorear con el queso rallado y la salsa Worcestershire y hornea durante veinticinco minutos.